Susanna Griso se separó de Carles Torres el pasado 23 de diciembre de 2020, después de 27 años conviviendo y 23 como casada. Fue una ruptura de mutuo acuerdo, y se intentó llevar con la máxima discreción posible.
Por eso mismo, ella reconoce que lo más duro fue contárselo a sus hijos. A la que más le costó fue a Mireia, que en ese momento tenía 14 años y estaba fuera de casa, estudiando Bachillerato en Irlanda.
"Yo intenté ser muy discreta, lo sabían muy pocas personas de mi entorno y aun así la noticia salió el 23 de diciembre en la portada de una revista. Yo ese día me iba a Barcelona y no había dicho nada a mi familia política, no les habíamos dicho nada porque estábamos esperando a comunicar la noticia y fue durísimo que se entererasen de esa manera, pero bueno, con Mireia, luego encontramos el momento. Mi hijo mayor Jan me dijo algo que me ayudó muchísmo: 'No pasa nada, ahora vamos a tener la mejor versión de cada uno de vosotros'", explicó la periodista.
Dice @susannagriso en @EspejoPublico que si a Irene Montero le hubieran ofrecido la embajada en Venezuela la hubiera aceptado.
— Al del bulo, patada en el culo (@Patada_Al_Bulo) January 23, 2024
Este es el nivel. pic.twitter.com/j4F7BCOGWo
El hijo, como se puede ver, afrontó la situación con mucha madurez y fue un gran apoyo para su hermana en estos momentos tan duros para la familia. A pesar de esta ruptura familiar, la relación entre todos no se ha desgastado, o al menos eso es lo que transmiten todas las partes.