La muerte de Isabel II deja Reino Unido en manos del nuevo rey Carlos III, que ahora ocupa el lugar de su madre, una de las monarcas más longevas de la historia. Sin embargo, Carlos de Inglaterra no solo ha heredado el poder sobre Reino Unido, sino también gran cantidad de propiedades y bienes, que antes eran de la reina Isabel, así como otras tantas empresas, formando todo ello una gran fortuna.
La gran fortuna del primer monarca
Como primogénito Carlos III habría heredado las propiedades privadas de la reina. Es decir, el castillo en Balmoral (Escocia), Sandringham, hogar de la granja de caballos de pura sangre conocida como Royal Studs. El monarca heredaría también la colección privada de joyas de Isabel II además de obras de arte, sellos raros e inversiones personales. Unos bienes que, según Forbes, estarían valorados en 500 millones de dólares.
Y a estos bienes anteriormente mencionados, hay que señalar que Carlos III accede al trono con su patrimonio real, la mayoría de los cuales recibió del Ducado de Cornualles. Un patrimonio de 27 millones de dólares este pasado 2021 y que ahora hereda el príncipe Guillermo como príncipe de Gales. Ahora el Rey hereda el Ducado de Lancaster, un legado que comprende 19,000 hectáreas, que incluyen urbanizaciones, edificios históricos, granjas, castillos, minas así como terreno agrícola en varias partes de Inglaterra y Gales, además de grandes propiedades en Lancashire. En el año 2000, el ducado generaba casi siete millones de euros, y actualmente, se considera que la cifra ha aumentado hasta los 27 millones.
Carlos III también ha heredado Crown State, que se trata de un negocio inmobiliario, del que recibirá el 25% de los beneficios al pertenecer a la corona. Sin embargo, la gestión de este negocio es independiente. Crown State pertenece al monarca británico como una corporación única. Cuenta con 17,5 mil millones de dólares activos netos. El 25% que se mencionaba anteriormente para la destinada “Subvención soberana” corresponde a la ganancia neta del año fiscal dos años previo.
El nuevo rey asume también la propiedad de instituciones que administran activos estimados en 42 mil millones de dólares. Entre estas instituciones se encuentran el Palacio de Buckingham, el Castillo de Windsor, y la Torre de Londres. Una fortuna que asciende a más de 500 millones de dólares en activos personales, en caso de que herede todo cuanto se ha mencionado anteriormente, y 42 mil millones más en fideicomiso como soberano.