El pasado 2 de abril la cantante colombiana Shakira ponía punto y final a su etapa en Barcelona, y ponía rumbo a Miami junto a sus hijos Milan y Sasha. Un viaje que se retrasó por la enfermedad de su padre y los trámites de acuerdo por la custodia de los niños con el ex jugador del F.C. Barcelona, Gerard Piqué.
“Me establecí en Barcelona para darle una estabilidad a mis hijos, la misma que ahora buscamos en otro rincón del mundo al lado de familia, amigos y el mar. Hoy iniciamos un nuevo capítulo en la búsqueda de su felicidad”. Este fue el texto que eligió la de Barranquilla para despedirse de la ciudad condal. Mientras tanto la cantante y su familia han estado de mudanza de la casa de Esplugues de Llobregat, aunque al parecer aún no ha podido llevarse todo lo que quería a su nuevo hogar en Miami.
El problema con los coches
Según varios medios, la cantante también estaría pensando en llevarse su colección de coches de lujo a su nuevo lugar de residencia. Sin embargo, sería un proceso que le costaría una verdadera fortuna. Y es que al parecer, para poder sacar los vehículos de España debe llegar a un acuerdo con la Hacienda Pública española, que le estaría exigiendo un pago en concepto de impuestos de unos 14 millones de euros, una auténtica barbaridad.
Dentro de la espectacular colección de coches de lujo, que posee la cantante, se encuentran dos Mercedes Benz, un SL 550 y un SLK 250, que están valorados en unos 14 millones y medio de euros cada uno, y son los que estaría más interesada en poder llevarse a territorio estadounidense.
Sin embargo no son los únicos vehículos de lujo que tiene en su garaje. La cantante de TQG también posee un Audi A 7 Sportback, un Tesla Model S, un Audi Q7 o un BMW X6.