Después de hablar de su ruptura y su gran crisis de pareja, la influencer y el ex concursante de ‘La isla de las tentaciones’, Sheila González y Mario González, han vuelto a dar más detalles de cómo sigue su relación en el canal de Mtmad de ella, ‘Al Natural’.
Esta vez la pareja ha hecho las maletas y se han dado un homenaje con una escapada para desconectar a Santander. Un romántico viaje de pareja donde ha habido lugar para el amor, la playa y sobre todo una charla muy importante para el futuro de su relación. Y es que la pareja se ha sincerado acerca de la posibilidad de volver a ser padres, ya que cabe recordar que tienen un hijo en común, Hugo.
Tras un amago de pelea, después de una cena discutiendo sobre cosas del pasado de las que cada uno tiene su opinión, la cosa no llegó a mucho más porque acabaron enterrando el hacha de guerra tras varias bromas entre uno y otro. Ambos se echaron en la cama a ver La Isla de las Tentaciones y se quedaron dormidos.
La pregunta del millón
Al día siguiente, con ambos aun en la cama, la influencer comenzó a decir que echaba de menos a su hijo Hugo, que había vuelto al colegio tras casi 20 días sin haber podido acudir. Y entonces soltó la pregunta del millón, “¿te apetece tener otro hijo?”, a ambos le entra la risa nerviosa y Mario le dice, “No mientas”, “que sí, que hay veces que me dan ganas, ¿y a ti?”, insiste Sheila. Entonces Mario reconoce que la primera vez no lo pasó bien, sobre todo al principio. Sheila volvió a la carga, “¿no tendrías otro 100%?, y Mario fue categórico, “No”. “¿Ni siquiera si te entra de mayor el instinto?”, comentó Sheila, “si me entra otra vez el instinto pues lo tendré, pero ahora mismo el instinto se quedó con Hugo en el hospital”, pareció sentenciar Mario.
Sin embargo la conversación derivó en una posibilidad real, “Yo lo que sí que tengo claro es que si tuviera otro niño sería contigo” dijo Sheila, a lo que Mario asintió “hombre yo también”, pero condicionó la paternidad, “la única manera de que me planteara tener otro sería si me aseguraran el 100% que iba a ser una niña”. Sheila ya empezó a bromear “Cualquier día te hago el lío”, pero él no se cortó, “no hace falta, tú me lo pides y disparo”. Luego para terminar la reflexión aclaran que en su situación no es el momento, y que aunque no planteen casarse ahora mismo, también tienen claro que únicamente lo harían el uno con el otro.