Si hablamos de dioses de la creación de contenido, por popularidad y número de seguidores, en España hay unos cuantos nombres que hay que citar a la fuerza: Auronplay, Ibai, Cristinini, Willy Rex o Jordi Wild, por lanzar solo unos pocos.
Jordi Carillo o mejor Jordi Wild nació en Manresa en 1984, actor, director de cine y psicólogo de vocación, es de esos casos extraños en el ecosistema de creadores de contenido españoles. Para empezar, porque es uno de los más seguidos de nuestro país después de casi diez años en Youtube, y después por las polémicas que suelen acompañar a sus videos.
La primera parte de su carrera la vivió con su primer canal, El Rincón de Giorgio. Durante varios años, este espacio fue uno de los más seguidos de la plataforma y alcanzó la respetable cifra de 7 millones de seguidores. Su contenido iba de lo autoparódico a las series de gameplays, retos subidos de tono con seguidores o críticas de películas, “Yo empecé a subir vídeos a mi canal por diversión, era algo que me entretenía y me lo pasa muy bien haciéndolo”, explicó en una entrevista de 2017. “Nunca llegué a imaginar que se convertiría en mi profesión”
Las críticas le vienen por el tipo de contenido que genera que estaba muy orientado al público adolescente, pero a esto, Jordi Wild introdujo la crítica a otros youtuber, o su forma de ver las relaciones de pareja, por lo que siempre han generado debate en redes, siendo acusado entonces de machista por ciertos sectores de la red, y rodeado de decenas de polémicas. Muy recordados son algunos de sus videos como “Hasta que arda”, una visión sobre las fiestas de hermandad americana bastante polémica, o cuando hizo una especie de reality para elegir novia. Acabó confesándose agotado de las exigencias de Youtube y, al modo de un césar romano que baja el pulgar, decidió matar a la criatura.
Una segunda vida con su segundo canal, The Wild Project.
El youtuber ha abandonado definitivamente el contenido ligero enfocado a videojuegos y se ha centrado en un formato que va a la contra de las píldoras visuales de cortísima duración que reinan en TikTok o los montajes de Youtube. El éxito de su nuevo canal se basa en entrevistas de varias horas a todo tipo de perfiles combinadas con comentarios a temas de actualidad, noticias polémicas en redes o debates sobre lo divino y lo humano.