Los precios de las entradas para la final de la Copa del Rey que disputarán el 6 de mayo el Osasuna y el Real Madrid, han subido entre un 6 y un 24% según la zona del estadio, con respecto a la última edición que jugaron Betis y Valencia CF.
El proceso de compra de entradas empezó este sábado y finalizará para el Osasuna el 1 de mayo, y para el Real Madrid el 6 de mayo, día de la final. La afición osasunista se ha mostrada especialmente indignada con el precio establecido por su club para las entradas, que oscilan entre 39 y 59 euros con visibilidad reducida y entre 78 y 221 con una ubicación con mejor visibilidad.
Por su parte el Real Madrid, ha fijado el precio de sus entradas entre 78 y 221 euros para las localidades con una ubicación con mejor personalidad, y entre 39 y 59 para las de visibilidad reducida.
Los aficionados han mostrado su indignación en redes sociales tras el anuncio de los precios con multitud de quejas: “¡Qué disparate de precios!”, “Es una vergüenza vender entradas de visibilidad reducida”, “Me parece un robo”, “Vaya robo” o “Vergonzoso el precio de las entradas”, han sido algunas de las múltiples quejas que ha habido al respecto entre la afición del Osasuna, un equipo que no está acostumbrado a jugar finales y para una que juegan, han conseguido indignar a sus aficionados.
Las entradas más baratas se han incrementado un 25% y las más caras tan solo un 4%. Una subida que se nota más en los precios de los sectores de Preferencia y Fondo. En Fondo han pasado a costar entre 40 y 50 euros las más baratas y de 157 a 202 las de mayor visibilidad, a tener un precio de 49 a 59 euros las más baratas y entre 157 a 217 las más caras.