La gran final de la UEFA Champions League está a la vuelta de la esquina, con la presencia de dos equipos que han peleado y se han enfrentado a múltiples adversarios y obstáculos con tal de llegar a esta instancia de la competición y, finalmente, alzarse con el trofeo más codiciado e importante a nivel de clubes.
Entre el Manchester City y el Inter de Milán hay más que sólo una copa en juego, se trata de los beneficios monetarios que este torneo deja al ganador, lo que podría representar un ingreso más que importante para cualquier equipo y que, además de el prestigio de ser conocido como el ‘campeón de Europa’, podría aportar significativamente para la estructuración del club de cara a la próxima campaña.
El monto del ganador
Llegar a la final de la Champions representa un logro auténtico para cualquier club en el aspecto futbolístico, pero para la cuestión económica, se trata de un impulso importante de cara a la temporada siguiente, seas o no el ganador de la competición, pues con sólo participar en el torneo se ingresan 15,6 millones de euros.
Las victorias de la Champions en la fase de grupos son muy importantes para el ingreso de capital en los clubes tanto grandes como pequeños pues representan la cantidad de 2,8 millones de euros obtenidos por victoria, una cifra más que importante teniendo en cuenta que el empate se paga, solamente, en 930 mil euros.
En fases de eliminación, por ingresar a los octavos de final, se perciben 9,6 millones de euros lo cual ya lo hace tentador, sin embargo, la fase de los cuartos de final, además de ser un reto alcanzarla, aumenta tu ingreso en un millón más, 10,6 millones de euros. Si el club logra alcanzar las semifinales, el monto asciende a 12,5 millones de euros y tras alcanzar la tan ansiada final de Champions, el monto a recibir es de 15,5 millones de euros y ganarla representa un extra de 4,5 millones; dando un total aproximado de 68 millones de euros al ganador de la competición.
Una final histórica
Los ingresos obtenidos por ambos clubes son más que bien recibidos, sin embargo, para las aficiones, las finales de Champions son más que sólo números y costos, son un escenario único donde los dos mejores equipos de Europa se enfrentan en una batalla deportiva donde sólo uno puede salir victorioso.
No es la primera vez que veremos una final con temática de ‘David contra Goliat’, donde el Inter es el menos favorito para alzarse con la ‘orejona’ frente a un Manchester City dirigido por Josep Guardiola que parece rozar la perfección pero que, en varias ocasiones, han dejado que el equipo más ‘débil’ los sorprenda y esta final podría no ser una excepción.