Acostumbrado a Balaídos, uno de los campos míticos del fútbol español, pero con una capacidad de un poco más de un tercio de los espectadores que caben en el feudo madridista, una cámara de DAZN siguió los momentos previos al partido, en los que los jugadores tras llegar al estadio y antes de ir a cambiarse para salir a calentar, hablan en corrillos y comprueban el estado del césped.
Y las cámaras de dicha cadena, captaron el momento en el que Gabri Veiga, un jugador asociado últimamente con el Real Madrid de cara al futuro, observaba impresionado el estadio que podría ser el suyo durante las próximas temporadas.
Son muchos los futbolistas que hablan de lo que impresiona el Bernabéu la primera vez que saltas al terreno de juego, sin duda uno de los más espectaculares sino el más espectacular del mundo, con unas gradas muy verticales que hace que el público esté muy encima de los jugadores, una presión que no todos pueden soportar.
Con las manos en la espalda y un botellín de agua en una de ellas, Gabri le confiesa a dos de sus compañeros unas palabras que dejan bien a las claras lo que le pareció el estadio: “¡Qué guapo!”, les dijo mientras no podía parar de mirar para las gradas del templo merengue.
Por Veiga se van a pelear muchos de los grandes clubs del fútbol europeo. La Premier sigue sus pasos, pero parece que el deseo del jugador es ser madridista. El próximo verano saldremos de dudas, puesto que el jugador revelación de la liga española está jugando sus últimos partidos como celeste.