Un viaje siempre es una excusa para pasar unos días desconectado de la rutina. Esto es lo que ha hecho Rocío Flores, mantenerse al margen de cualquier polémica que pueda surgir y disfrutar de la compañía de su novio, Manuel Bedmar.
El destino ha sido uno de los más mágicos de Europa que se encuentra en el país vecino. Concretamente, han viajado a Disneyland Paris, y así ha culminado un fin de semana lleno de emociones e ilusiones, haciendo realidad un sueño.
Durante dos días, la pareja ha transitado los lugares del parque de atracciones que se encuentra en París. Rocío ha compartido con sus seguidores varios momentos con su novio y lo bien que lo han pasado. "Estoy un poco desconectada", comenzaba reconociendo que había estado apenas con el móvil.
"Hemos disfrutado a tope dos días en Disney", continuaba diciendo, añadiendo que no habían parado de recorrer este mágico destino, al que para muchos visitantes estar ahí significa un sueño hecho realidad. Cansada del viaje, ella misma ha contado que se han tirado entre "10 y 11 horas caminando y por los aires. Literal que me duelen las caderas y las piernas increíble", destacaba Rocío.
Y es que, además de hacer una parada obligada para apreciar el mítico Castillo de la Bella Durmiente, fotografiando la construcción por la noche, Rocío y Manuel han podido disfrutar de muchas de las atracciones más extremas. Tanto ha sido así que hasta no les ha importado aguantar una hora de cola para montarse en la de "Nemo", tal y como ha reconocido la propia hija de Antonio David.