Presume de haber sido el único hombre en quien Diana confiaba. Paul Borrel le aseguró a Risto Mejide en 'Viajando con Chester' que le gustaría explicarles a Guillermo y a Harry, antes de que sea tarde, historias y algunos secretos que aún guarda sobre su madre.
"A través del cáncer he aprendido a contar la verdad", le dijo al presentador antes de desgranar una ristra de recuerdos y vivencias que comenzaron cuando él tenía 18 años y entró a trabajar en Buckingham.
en 1978, entró al servicio de los príncipes de Gales en la residencia de Highgrove House, donde no lo tuvo fácil. En esa época, la convivencia de Carlos y Diana ya hacía aguas y, como explicó Paul, vivía en "un mundo dividido" y tuvo que gestionarlo con tacto, a pesar de que eso no impidió algún encontronazo con su "jefe".
Además, el exmayordomo de Diana se mostró muy duro con su hijo pequeño y se refirió a una carta, que hizo pública algunos años, en la que la princesa de Gales decía que esperaba que "las semillas" que plantó en sus hijos les dieran "la fuerza, el conocimiento y la estabilidad que ellos necesitan". Y opinó que el duque de Sussex no cumplió con el legado de su madre.
"Al principio pensé que sí, que seguía los pasos de Diana liberándose de la Familia Real. Le aplaudí porque quería mantener a salvo a su familia y tener una vida tranquila. Pero entonces llegó la entrevista con Oprah, el documental de Netflix y el libro, donde habla de su odio a Camilla, peleas con su hermano, de su pene y de la pérdida de su virginidad. Harry ha cruzado la línea de la lealtad y se ha pasado al lado comercial y al de la celebridad. Ha vendido su alma al diablo".