Ana María Aldón es una más de las muchas personas que durante su infancia tuvieron que atravesar momentos muy duros. Su padre la maltrataba, algo que sin duda ha dejado una profunda huella en su vida y que aunque haya superado, se le hace muy difícil recordar aquellos momentos.
Lo hizo en el programa Fiesta ante la atenta mirada de sus compañeros y de la audiencia. Pero fue por medio de una práctica cada vez más habitual en este tipo de programas. Por medio de la hipnosis, Aldón fue sometida a revivir un pasado muy oscuro de su vida.
Jorge Astyaro fue el hipnotizador que la sometió al recuerdo de una de las personas que negativamente han marcado su infancia y por ende su vida. La hipnosis ha hecho que "viva aquel momento con la misma intensidad. Recuerdo hasta el olor que había", explicaba a sus compañeros Ana María Aldón.
"He vuelto a sentir el dolor físico, los verdugones, la sangre, eran como latigazos. Y ese dolor que te escuece es el que he sentido. El dolor emocional es el que viene después", explicaba Aldón. Recordaba también que estos malos tratos los sufría día tras día, el recuerdo provocó el derrumbe pero también la sinceridad más absoluta.
Desde que pasara por el trance de la hipnosis ha reconocido que "estoy durmiendo bien. Aunque también noto como si tuviera la batería baja, como que el corazón me va muy despacio, como si tuviera poca vida", concluía Ana María Aldón entre lágrimas.