El mítico cantante Michael Jackson siempre estuvo rodeado de escándalos como el cambio de su apariencia física, sus fallidos matrimonios, la identidad oculta de sus hijos, las acusaciones en su contra por abuso hacia menores de edad, así como su lamentable e inesperada muerte. Sin embargo, también dio de que hablar cuando adoptó un chimpancé que consintió como a un hijo.
Bubbles
Bubbles, que así se llamaba, nació en 1983 en Austin, Texas, en un centro de investigaciones que realizaba pruebas médicas de laboratorio en primates, el tierno chimpancé fue acogido por el "Rey del Pop" cuando todavía era muy pequeño. Desde que el intérprete de “Billie Jean” adquirió al chimpancé lo trató como a una mascota, diversas fotos revelan que Bubbles utilizaba ropa y que incluso comía o bebía del mismo vaso que el cantante.
En un principio, Bubbles vivió en Encino, California en la casa de la familia Jackson, sin embargo, en 1988 fue trasladado a Neverland. Michael Jackson declaró en el documental Living With Michael Jackson que, durante este tiempo, el chimpancé fue muy mimado a tal grado de dormir en una cuna en la habitación del Rey del Pop, utilizar su baño y hasta comer dulces en la sala de cine del rancho.
El primate acompañó por primera vez al artista en la gira "Bad World Tour" en septiembre de 1987, y luego, durante una visita de Jackson en Japón, una fotografía de Bubbles tomando té de la misma tasa de Jackson le dio la vuelta al mundo. Sin lugar a dudas, era la mascota más popular del momento y su relación con el cantante fue admirada y criticada a partes iguales.
Con el paso de los años, la mascota empezó a mostrar comportamientos agresivos, muy comunes en los de su especie, por lo que fue enviado al Santuario de Animales en California, pero este centro fue cerrado y Bubbles tuvo que ser trasladado al Centro de los Grandes Simios en Wauchula, Florida lugar en donde viven varios primates que formaron parte de zoológicos, tiendas, casas particulares y algunos que trabajaron en la industria del entretenimiento. Tras la muerte de Jackson en junio de 2009, se lanzó el documental "Michael Jackson and Bubbles: The Untold History", en el que se muestra como La Toya Jackson, hermana del artista, visita regularmente al chimpancé, que aún vive.